Como se acerca el día de Reyes, en nuestras casas no puede faltar el "roscón de reyes". En verdad es un poco laborioso por los tiempos de levado, pero no es difícil. Por eso, os doy la receta con tiempo para que vayáis practicando, ya que si lo hacemos es porque disfrutamos con ello y con la satisfacción de que les guste a nuestra familia.
INGREDIENTES
Masa madre
- 100 g de harina de fuerza
- 12 g de levadura prensada fresca
- 100 ml de leche tibia
- 10 g de azúcar glas
Masa
- 550 g de harina de fuerza
- 150 ml de leche tibia
- 100 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 120 g de azúcar glas
- 2 huevos a temperatura ambiente
- 25 g de levadura prensada fresca
- 2 cucharadas soperas de agua de azahar
- 1 pellizco de sal
- ralladura de 1 limón
- ralladura de 1 naranja
- 1 huevo
- 4 cucharadas de azúcar
- 1 cucharada de agua
- frutas escarchadas
- almendras laminadas o picadas
PREPARACIÓN
En primer lugar, hay que preparar la masa madre. Para ello, disolver la levadura en la leche tibia. En un bol, colocar la harina y añadir el azúcar, hacer un hueco en el centro y agregar la mezcla de leche y levadura. Amasar con amasadora o a mano 5 minutos, formar una bola. Preparar un bol amplio con abundante agua tibia (de 30 a 35 grados) e introducir la masa. Cuando la bola de masa flote o doble su volumen estará lista.
El siguiente paso será preparar la masa definitiva del roscón.
Volvemos a disolver 25 g de levadura en la leche tibia y reservamos.
Poner los huevos en un bol amplio o en el bol de la máquina amasadora con el pellizco de sal y batir.
Añadir el agua de azahar, el azúcar y batir. Incorporar las ralladuras de naranja y de limón, también la solución de leche y levadura y seguir batiendo.
Agregar poco a poco la harina tamizada, mezclando bien después de cada incorporación. Añadir la mantequilla y amasar bien. Por último incorporar la masa madre ya fermentada (escurrir bien el agua). Amasar muy bien durante unos 10 minutos, os ayudará si os engrasáis las manos y la mesa de trabajo con aceite.
Transcurrido el tiempo de fermentación, coger la masa y dar unos golpes contra la mesa de trabajo engrasada, para sacar el aire y volver a amasar un poco más. Hacer una bola e introducir los dedos en el centro para hacer un agujero, vamos estirando para darle la forma a nuestro roscón.
Preparar la bandeja de hornear con un papel vegetal y colocar encima el roscón. Para que no se cierre el agujero central cuando vuelva a fermentar la masa, pondremos dentro un vaso o un bol pequeño engrasado en sus bordes con aceite. Cubrir con un paño e introducir dentro del horno apagado, volveremos a dejar fermentar de nuevo por espacio de una hora hasta que doble su volumen.
Preparar la bandeja de hornear con un papel vegetal y colocar encima el roscón. Para que no se cierre el agujero central cuando vuelva a fermentar la masa, pondremos dentro un vaso o un bol pequeño engrasado en sus bordes con aceite. Cubrir con un paño e introducir dentro del horno apagado, volveremos a dejar fermentar de nuevo por espacio de una hora hasta que doble su volumen.
Pasado este tiempo, sacar del horno, quitar el bol del centro y pintar el roscón con huevo batido por toda la superficie. Adornar con la fruta escarchada y las almendras laminadas o picadas.
Por último, humedecer el azúcar con el agua y repartir por encima.
Precalentar el horno a 200º con calor arriba y abajo, introducir el roscón, bajar la temperatura a 180º y continuar a esta temperatura durante 20-25 minutos, dependiendo del horno. Transcurrido el tiempo sacar del horno y dejar enfriar sobre rejilla.
Ahora viene el eterno dilema...de que lo rellenamos. Pues al gusto..., en casa lo preferimos de nata. Pero con estas proporciones, podéis hacer dos pequeños para distintos rellenos.
Espero que os guste y por adelantado os deseo un ¡Feliz día de Reyes!
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